Lo primero que debemos hacer es cortar la cebolla, los tomates, el pimentón y el celery en cubitos pequeños.
El pescado debemos cortarlo en tiras medianas y algo gruesas para que no se desarmen dentro de nuestra paella.
Debemos lavar muy bien nuestros mejillones, tomando en cuenta que estos deben estar bien cerrados, si por casualidad les toca alguno abierto, ese deben desecharlo inmediatamente.
En una olla con agua hirviendo agregamos nuestros mejillones previamente lavados, en este punto deben abrirse por efecto del calor.
Una vez abiertos, los retiramos de la olla y los reservamos.
En una paellera bien caliente, agregamos un poco de aceite de oliva y sofreímos los vegetales en el siguiente orden: primero la cebolla, una vez que esta se vea transparente, agregamos el pimentón y el celery, condimentamos con las aceitunas, las alcaparras, el azafrán, la sal, la pimienta, el ajo y el pimentón español en polvo.
En este punto agregamos los camarones, y los sofreímos hasta que tomen su color rosa característico, los retiramos de la paellera y agregamos los tomates.
Una vez que los tomates estén bien blandos, agregamos el arroz y mezclamos bien para que se integre con los vegetales.
Luego agregamos el caldo de vegetales, revolvemos para hidratar el arroz y colocamos el pescado previamente cortado en tiras sobre el arroz para que se cocine con el vapor, tapamos y revisamos ocasionalmente para rectificar el punto del arroz.
Es importante no estar revolviendo el arroz, para que este no se quiebre.
Cuando el arroz este casi listo, agregamos los camarones y los mejillones, disponiéndolos en forma decorativa en toda la superficie de nuestra paellera.
Sabemos que la paella esta lista cuando probamos el arroz y esta al dente, además no debe tener presencia de líquido.
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